domingo, septiembre 19, 2004

CASI PECADOR

Un hombre casado se confiesa: 
-Padre, casi pequé de adúltero con otra mujer.-
-¿Cómo que ?casi??-pregunta el cura.
-Y... casi, porque nos refregamos un rato, pero después paramos-explica el pecador.
-Refregarse un poco es lo mismo que meterlo-lo amonesta el cura.-Cinco Avemarías y cien pesos en la alcancía para los pobres.-
El tipo sale del confesionario, hace sus oraciones y, al salir, saca un billete de cien pesos, lo pasa sobre la alcancía y lo vuelve a guardar. El cura, que lo estaba mirando, lo increpa:
-Te ví, pecador; ¡no pusiste nada en la alcancía!-
-Pero padre,-se defiende el tipo.-usted dijo que refregar un poco era lo mismo que meterlo...-
BWAHAHAHAAAHA!

2 comentarios:

Janet Chalou dijo...

¡Ja, ja, ja, ja! Está buenísimo.

Ichinén dijo...

Si, salvo que tiene un par de errores de código de transcripción. Se metieron signos que no van y arruinar el sentido del chiste.